Kiev, Ucrania —Rusia movilizó una docena de unidades militares de élite del puerto de Mariúpol al este de Ucrania y atacó ciudades en toda la región, afirmaron el viernes autoridades ucranianas, mientras ambos bandos se abalanzan hacia lo que podría ser una batalla épica por el control del corazón industrial del país.
Mientras tanto, Rusia reportó que un soldado murió y 27 fueron dados por desaparecidos tras el incendio a bordo del buque de guerra Moskva, que naufragó hace una semana luego de lo que los ucranianos dijeron fue un ataque con misiles. Moscú había reportado anteriormente que todos a bordo habían sido rescatados.
El Ministerio de Defensa de Rusia no reconoció que el barco fuera atacado. Insistió en que hubo un incendio luego del estallido de municiones, sin explicar cómo sucedió eso. La pérdida del crucero lanzamisiles —el buque insignia de la flota de Rusia en el Mar Negro— representó un humillante revés para Moscú.
En Mariúpol, que en gran medida ha sido reducida a escombros humeantes tras semanas de bombardeos, la televisora estatal de Rusia mostró la bandera de los separatistas prorrusos de Donetsk izada en lo que afirmó es el punto más elevado de la ciudad, su torre de televisión. También mostró en llamas lo que dijo es el principal edificio de la sitiada planta siderúrgica Azovstal en Mariúpol.
El Kremlin ha enviado más de 100,000 soldados y mercenarios de Siria y Libia a la lucha en Ucrania, y despliega más tropas en el país todos los días, aseveró Oleksiy Danilov, secretario del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania.
“Tenemos una situación complicada, pero nuestro ejército defiende a nuestro Estado”, agregó.
Varias ciudades y poblados fueron bombardeados en el Donbás —la región industrial situada en el este que el Kremlin ha declarado como el nuevo escenario principal de la guerra—, así como en la región de Járkiv, a poca distancia al oeste, y en el sur, informaron autoridades.
Las fuerzas rusas atacaron aproximadamente a 2,000 combatientes ucranianos que están atrincherados en la extensa planta Azovstal, el único foco de resistencia en Mariúpol, reportó la alcaldía.
“Todos los días sueltan varias bombas en Azovstal”, afirmó Petro Andryushchenko, un asesor del alcalde de Mariúpol. “Los combates, la artillería, los bombardeos no paran”.
Un día antes, el presidente ruso, Vladimir Putin, clamó victoria en la batalla por Mariúpol pese a la resistencia en la planta siderúrgica. Ordenó a sus fuerzas no atacar la planta para acabar con los defensores, sino cercarla con el fin de obligarlos a rendirse.
Mariúpol ha tomado una enorme importancia en la guerra. Capturarla privaría a los ucranianos de un puerto vital y completaría un corredor terrestre entre Rusia y la península de Crimea, que Putin tomó de Ucrania en 2014.